Psp. Mariana Ibarzábal.
Tratar de ayudar a una persona con depresión puede llegar a ser un camino difícil lleno de impotencia e incertidumbre. Teniendo en cuenta que la depresión es algo que va más allá de solo estar triste o tener un bajón, aquí te compartiré algunos consejos que puedes implementar.
Aprende acerca de los síntomas de la depresión.
Esto te ayudará a estar más alerta por si alguien de tu círculo cercano tiene depresión. Puedes leer aquí un poco más del tema.
Identifica los signos de advertencia de empeoramiento de la depresión.
Aunque cada persona manifiesta la depresión de manera distinta, presta atención a tu ser querido y cómo evoluciona su depresión.
- Sentimiento de tristeza y desgana acompañado de una autoestima baja, que conlleva una falta de energía, dejadez y aislamiento social.
- Falta de apetito, que en ocasiones se traduce en pérdida de peso.
- Trastornos del sueño en forma de dificultad para conciliarlo o despertares frecuentes.
- Falta de concentración y memoria.
- Ideas relacionadas con la muerte que van desde no querer estar vivo a, en los casos más graves, planificar la muerte.
Conoce los riesgos de suicido.
Las personas con depresión son más propensas a cometer suicidio, no dejes pasar los signos de comportamiento suicida y actúa de inmediata.
a. Habla con otras personas de su círculo cercano sobre tu preocupación.
b. Busca ayuda profesional.
c. Llama a una línea directa de prevención del suicidio.
No dejes pasar cualquier signo de advertencia de suicidio.
Es importante conocer y poner atención a cualquier advertencia frecuente de suicidio o pensamientos suicidas.
Brinda apoyo.
No puedes solucionar la depresión de tu ser querido, pero tu comprensión y apoyo puede brindar un papel muy importante.
- Fomenta que siga en tratamiento.
- Escúchala.
- Ofrece tu ayuda cuando sea necesario.
- Ayuda a crear un ambiente con pocos factores estresantes.
- Alienta a la persona a buscar actividades de su interés que ayuden a su salud mental.
Entiende que se trata de una enfermedad.
Nadie tiene depresión por gusto, se empática con la situación que está viviendo.
Ten en cuenta que la persona te necesita y te valora, aunque a veces parezca lo contrario.
No le digas que se tranquilice, que le eche ganas o que se anime.
A menos de que sepas brindarle herramientas necesarias para ayudarlo, no interfieras en ese proceso.
Sé muy paciente.
Comprende que no será fácil, la depresión sube y baja.
Acerca del autor
Mariana Ibarzábal
Psicopedagoga que busca educar e informar desde una perspectiva feminista. Me apasiona investigar sobre los trastornos del neurodesarrollo y de aprendizaje en mujeres porque desafortunadamente las mujeres somos muy poco estudiadas y es algo que debe cambiar.