Psp. Mariana Ibarzábal.
El trastorno por déficit de atención/hiperactividad es un trastorno del neurodesarrollo el cual se caracteriza por la falta de atención, hiperactividad e impulsividad. Hay tres tipos de TDAH según la característica que más predomine, ya sea la falta de atención, la hiperactividad/impulsividad o una combinación de ambas.
¿Cómo identificar este trastorno?
Es importante tomar en cuenta que no todas las personas con este trastorno manifiestan los mismos síntomas y con la misma intensidad. La característica esencial del TDAH es un patrón persistente de desatención y/o hiperactividad-impulsividad, más frecuente y grave que el observado habitualmente en sujetos de un nivel de desarrollo similar.
Algunos síntomas del TDAH son los siguientes:
- Impulsividad.
- Desorganización y problemas para establecer prioridades.
- Escasas habilidades para administrar el tiempo.
- Problemas para concentrarse en una tarea.
- Problemas para realizar múltiples tareas a la vez.
- Actividad excesiva o inquietud.
- Escasa planificación.
- Baja tolerancia a la frustración.
- Cambios de humor frecuentes.
- Problemas para realizar tareas y terminarlas.
- Temperamento irascible.
- Problemas para enfrentar el estrés.
Hay que resaltar que se tiene que distinguir el TDAH de comportamientos propios de infantes activos, retraso mental, situaciones de ambiente académico poco estimulante y sujetos con comportamiento negativista desafiante.
TDAH en mujeres.
Es común que este trastorno se diagnostique en la primera infancia y sea más común en varones, aunque esto se puede deber a una visión masculinista de la ciencia, ya que el diagnóstico en mujeres llega de manera tardía y ya cuando hay comorbilidad con otros trastornos, tales como la depresión.
Según el National Resource Center on AD/HD Children and Adults with AD/HD (CHADD) poca es la información que hace referencia al TDAH en las mujeres debido a los pocos estudios realizados en esta población.
La mayoría de la información que tenemos al respecto está basada en la experiencia clínica de los profesionales de la salud mental que se han especializado en tratar a la mujer adulta.
Es común que las mujeres llegan a conocer su propio TDAH cuando sus hijos son diagnosticados, y a medida que van aprendiendo acerca del trastorno, van identificando patrones similares conductuales en ellas mismas cuando eran jóvenes
Como se había mencionado con anterioridad, las mujeres con TDAH presentan mayores índices de depresión mayor, ansiedad, trastornos del humor, fracaso escolar y dificultades cognitivas, estas comorbilidades generalmente son diferentes de las consideradas en los valores, debido a la acción directa de la fluctuación en los niveles hormonales de las mujeres.
La neuropsicóloga Sara Ortega (2025) menciona que es importante recalcar que la diferencia entre los sexos no está en los síntomas sino que se encuentra en la variada expresión o manifestación de éstos y su impacto en la funcionalidad de los hombres y las mujeres.
La morfología cerebral es igual en ambos sexos, pero la expresión de los síntomas es muy diferente, ya que se manifiestan en dependencia de la interiorización del control sobre su actividad diaria.
Si este control es eficiente, actúa en dependencia de las circunstancias adaptándose a ellas, pero si este control no está interiorizado aparece como externo y la persona se siente víctima de las circunstancias, que controlan su vida y sus esfuerzos se convierten en ineficaces.
Las mujeres con TDAH requieren intervenciones y adquisición de estrategias en:
● Autocontrol y técnicas de control emocional.
● Comunicación asertiva.
● Entender y aceptar los retos del TDAH, identificando las fortalezas y debilidades personales.
● Identificar las fuentes de estrés en la vida diaria y hacer cambios sistemáticos en la vida para
reducir el nivel de estrés.
● Simplificar la vida: jerarquizar y priorizar las necesidades y tareas.
● Buscar estructura y apoyo de la familia y de los amigos.
● Fomentar un clima familiar positivo, afectivo, cooperativo, con equidad en la repartición de tareas
y con apoyos emocionales.
● Programar periodos de retiro diario para ellas mismas.
● Canalizar el exceso de energía, la ansiedad y las emociones negativas a través de actividades
lúdicas, deportivas, artísticas, etc.
● Desarrollar hábitos saludables de cuidado propio, tales como higiene del sueño, buena
alimentación, ejercitarse, etc.
¿Cómo distinguir entre un comportamiento típico y el trastorno por déficit de atención e hiperactividad?
Es normal que lleguemos a tener algunos síntomas similares al TDAH, sin embargo estas son ocasionales, por lo cual no entraría dentro del trastorno, sólo se diagnostica con este trastorno cuando los síntomas son los suficientemente graves como para causar problemas en distintos aspectos de su vida (familiar, laboral, social, personal).
El TDAH es más complejo de diagnosticar en gente adulta, ya que algunos síntomas son similares a otras afecciones, tales como la ansiedad u otros trastornos del estado de ánimo.
Referencias
para Trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) en adultos – Síntomas y causas.
(2023, enero 25). Mayo Clinic. Recuperado de https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-
conditions/adult-adhd/symptoms-causes/syc-20350878
Sulkes, S. B. (s.f.). Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDA, TDAH) – Pediatría –
Manual MSD versión para profesionales. MSD Manuals. Recuperado de
https://www.msdmanuals.com/es-mx/professional/pediatr%C3%ADa/trastornos-del-aprendizaje-y-
del-desarrollo/trastorno-por-d%C3%A9ficit-de-atenci%C3%B3n-hiperactividad-tda-tdah
TDAH y Mujer. (s.f.). Fundación CADAH. Recuperado de
https://www.fundacioncadah.org/web/articulo/tdah-y-mujer.html
Acerca del autor
Mariana Ibarzábal
Psicopedagoga que busca educar e informar desde una perspectiva feminista. Me apasiona investigar sobre los trastornos del neurodesarrollo y de aprendizaje en mujeres porque desafortunadamente las mujeres somos muy poco estudiadas y es algo que debe cambiar.
